Entradas

Mostrando entradas de 2013

Microdrama

Las fotografías que hago últimamente me hacen pensar en vender mi cámara y comprarme un billete de vuelta a casa. No descarto la posibilidad de que todo sea una maniobra de distracción. Ponerme a procesar unas fotos de mierda me lleva tanto tiempo que mi mente no piensa en otra cosa. De hecho es que no piensa. Me pregunto por qué llevo días como un zombie arrastrando los pies al andar, dispersa, como si la vida no fuera conmigo, como si "eso" solo le ocurriera a los demás. ¡Eh! ¡Me han dejado fuera de la gente VIP! ¡Fuera de ese grupo de personas al que le pasan todas las cosas extraordinarias!    Siento como si tuviera un agujero en el centro de mi alma y no sé a dónde me va a llevar. Como un mantra que es igual de ineficaz y estúpido que las banderitas que les ponen en las albóndigas de Ikea, me repito "la actitud lo es todo, la actitud lo es todo, la actitud lo es todo...". Pero creo que nadie llegó a hablar nunca de qué pasa cuando los mantras no funciona

Crevillent en Semana Santa

En el número trece, arriba, las ventanas estaban cerradas, de los balcones colgaban mantos, que anunciaban Semana Santa.   Monaguillos portando velas, aburridos de seguir al muerto, cae la cera, pies descalzos, tambores rompiendo el silencio.   Manolas sin Alhambra, con falda corta y largo manto, supongo que irían rezando, aunque alguna de ellas hablara.   Por el número trece, arriba, cerca del ayuntamiento, pasaron Las Tres Marías y un coro de voces en negro, cantaban sin alegría...   ¡Es noche de fe e incendio!       

Barcelona y tú

Los taxis, como avispas,  zigzagueaban por Gran Vía,  desde Gracia hasta tu calle, desde La Rambla hasta la mía.    Barcelona, ¡perezosa! despeinada todo el día dejas los platos en la mesa   tienes la ropa aún tendida. Me aprendí tus calles en verano me bebí tu vino  me enamoré despacio Corrí sincera a agradecerte todo lo que me has dado. ¡Tanto tiempo para esto! ¡Tanto tiempo esperando! ¡No es verdad que por tí fuera! Dejarlo todo y seguir andando. ¡Qué ceguera! ¿Recuerdas? Todo esto lo vengo hablando, desde hace trece años y desde diciembre algunas veces  de vez en cuando...     

Teatro

Y le escribo a Dios, al Universo, a los atormentados, a los muertos.   El amor me hizo daño, ¿No lo ves? ¿No lo entiendes? De migajas me alimento   ¡Pero qué banquete frente a mí! ¿Qué hago yo con todo esto? No lo quiero y tengo hambre, es demasiado...   No lo merezco.    Y no es por tí,  lo juro, ¡Mírame!  Aún soy pequeño.   Déjame con mi cruz, déjame con todo esto.   ¿A qué esperas?  ¡Vete! Si me miras, no me encuentro.   Estoy hecho de penas   y de duelos, para mí no hay planes  deberías saberlo...                                  

Paisaje con dos tumbas [...]

Y sin que ninguno de los dos dijera nada, se quedaron en un limbo  donde él escribía y ella escuchaba.     Y fue precioso - pensó ella -  ser merecedora de todo aquel amor, confuso y rebelde,  oscuro y disperso, como un poema de Jack Kerouac.                                 "Mi amada que no quiere amarme: Mi vida que no puede amarme: Las seduzco a ambas".   Pero sí quisieron amarle,  sí pudieron amarle.   Fue entonces cuando la causa imposible se volvió posible  y todo acabó.  Nadie sabe,  nadie habla.    Había urgencia de subir al cielo, de bajar al infierno...  y el pasado,  no acompañó.    Con más hiel que sangre,  corriendo por las venas, con el rencor dando ceguera, y con más miedo que ganas de que se repita de nuevo la misma escena,   no hay posibilidad alguna de entender,  de pensar,  que lo que no les dieron,  ya nadie se lo va a poder dar.    Y empieza la búsqueda de sustitutos... A veces l

Malditas trincheras

"Una de las maneras más comunes y efectivas que tiene el ser humano para sabotear su propia felicidad, es buscar la más mínima imperfección hasta en los escenarios más hermosos." A mí se me da bien. ¡Qué digo bien! se me da de perlas, de maravilla, fenomenal, una destreza bien pulida y trabajada, se notan los años de experiencia. Cuando me dejo el burladero abierto y sale el ego embistiendo ya puedo hacer quiebros, que un par de revolcones siempre me llevo. Y me echo a llorar un rato o unos días, depende del tamaño del cuerno, de si alcanza a tocarme el alma o no.   Claro, recién licenciada en desapego, me confío y resulta que esto va a brotes, que de repente se me caen los muros de contención, bajo la guardia y me quedo en pelotas a la vista de todo el mundo. Y mira tú por donde me reconozco pretenciosa, insegura y celosa y me culpo por ello. Me odio por ello. Me pregunto qué tengo yo para ofrecerte, ¿un par de noches? ¿un café? ¿un monólogo que te haga bostezar? Co

Mapa de estupidez humana

Un ataque de ciencia ficción se pasa con un vaso de leche y unas magdalenas, un poco de drama y un plan de emergencia por si te da por hacer maletas. ¡Me encanta inventarme despedidas!. Esto no puede estar mal, podríamos hablar de albatros en lugar de mariposas y no pasaría nada, ¿no?, ¿o sí?. ¡Me encanta ser espectadora!. Un salto mortal bonito, con montones de pañuelos de papel, visitas al psicólogo y un par de post en tu honor. ¡Precioso! ¡Aplausos! ¡Me encanta predecir!       Estoy muerta de miedo. ¿Se nota?.     Pues no, no me encanta...           

La inevitable consecuencia de partir nueces

Y un día me descubro pidiéndole a los de allá arriba... - Venga va... Sois unos cuantos por ahí, estoy segura que entre todos podéis echarme un cable. Me habéis pasado unas cuantas herencias a mala fé; una nariz grande, unos pechos pequeños, un 40 de pie (yo en Japón sería considerada como un monstruo y me sacrificarían en la plaza del pueblo para diversión de niños y adultos), cierta tendencia a la confusión y atracción por lo revuelto y sobre todo, sobre todo, facilidad para ovular de dos en dos. Así que ya podéis poneros en serio a arreglar este desaguisado. ¡Mandarme señales claras, joder! Y así fue. Me dieron dos tazas de señales. Por todos los lados y en todos los idiomas. Señales que me golpearon en toda la cara, que me hicieron daño y me dejaron con el culo al aire. Señales que me quemaron, que lo emborronaron todo aun más, que me llevaron a tocar fondo. Me había estado presionando, obligando y esforzando tanto por endulzar lo amargo que me olvidé de ser firme y razona

Oda a mi ex

Te iba a escribir un post y de repente me he acordado de algo que leí en un libro... "No voy a hablar sobre mi ex porque una palabra no le definiría y dos es dedicarle demasiado tiempo."

La teoría siempre suena bien

Claro que, pensándolo bien, si no doy todos los abrazos que hay en la recámara, ni digo lo que no digo y me voy con cierta urgencia es porque entiendo, sé, que no voy sola a ningún sitio, que soy tres y que por lo tanto no voy a poder prestarte la atención que mereces ni serás nunca mi prioridad. Es una manera bastante extraña de castigarme, es probable, o de protegerme, quien sabe. Porque no sé si voy a poder soportar ver correr a más gente y antes de que eso ocurra, me hago la interesante y espero a ser invitada para no pillarme los dedos, para evitar pensar que un no tenga alguna relación con el hecho de que ahora mismo huelo a merienda de niños, que diría Virginie. Y no hablo desde el victimismo barato ni desde el odio más primitivo, hablo desde la razón y el pragmatismo, desde la lógica y el 2+2. Que yo sé lo que soy y lo que tengo, que sé que peso, que en ocasiones soy un coñazo, que a mi alrededor siempre hay ruido y horarios y siestas, que tengo un ex que a veces me

Pretérito bastante imperfecto

Llevo tres cervezas, ¿Se puede saber qué estoy celebrando?. Antes de poner el contador de mi vida a cero he llenado dos bolsas de basura con mi pasado, con todo lo que ya no soy. Eso fue ayer. Pasado también. Y siguen en mi habitación. Aun están en mi habitación. ¡Un brindis por la mierda acumulada en diez años! Mejor dicho.. ¡Por mi mierda acumulada en diez años! que es mía y solo mía y si quisiera podría venderla al mejor postor porque hay miedo, torpeza, desorden y demanda. Es decir, casi lo mismo que hay ahora, pero reposao y con raigambre.   Entonces ¿Celebro que voy o que vengo?, ¿Qué nunca me fuí de allí?, ¿Qué no estoy desde que vine?, ¿Qué no soy desde que me fuí? No hablemos de mí... Elige bien tus últimas palabras ¿Y sabes por qué? Por dos razones; porque soy peor en lo que mejor hago y porque se acaba el tiempo.     Tic, tac, tic, tac. 

Apocalipsis, por favor

Imagen
Todo es como tiene que ser, todo está bien, ¿verdad?. Poner distancia de por medio para que no me toque nada que ya me haya tocado antes y coleccionar cosas nuevas es una muy buena idea, mucho mejor que quedarme y seguir quitándole el polvo a las viejas para que parezca que no lo son tanto. Dios mío... ¡Pero cuánto autoengaño y ceguera! No me dejes caer... No me abandones... Sácame a patadas, a empujones, dame una de tus generosas bofetadas pero no me dejes aquí contanto días, tachando años, caminando hacia atrás. A mí a veces se me ocurren cosas estúpidas, ya lo sabes, no soy tan lista como parece, ni tan fuerte, ni tan capaz, ni tan indiferente. Ahora mismo no soy nada de nada pero si quieres puedo ser todo de todo. Si me salvas, si me recuerdas lo grande que puedo llegar a ser me quedaré contigo para siempre. Cierto, esto suena horrible, suena a apego y además de la peor clase, al más insano, al más alienante y autodestructivo... ... Y qué ¿No hemos hecho acaso cosas peores?.